Generando Valor Pescando
Hace
tiempo escuché una frase que me causó mucha curiosidad, "Generando Valor
Pescando", frase acuñada por mi gran amigo Daniel González, expresión que
en un primer momento no logré entender y en la cual no supe interpretar su valor
holístico. Resulta que esas tres palabras tienen un valor trascendental que
cambia por completo el paradigma de la disciplina de la Pesca Deportiva.
En
una primera instancia hay que comentar que la gran mayoría de los pescadores,
por no decir todos, tienen en su subconsciente una premisa que viene en nuestra
carga genética, comer para sobrevivir, y por supuesto los peces son comida.
Muchos de nosotros nos iniciamos pescando para comer o pescando para llevar
comida a algún lugar. Quien no haya pescado y comido su rival, por lo menos
alguna vez, que lance la primera piedra. Aunque afortunadamente esto ha venido
cambiando paulatinamente en el tiempo, lamentablemente existen muchos
pescadores que aún siguen dejándose llevar por sus instintos genéticos y consumen
todo a su paso. No se trata de juzgarlos o buscar culpables, es cuestión de
tiempo, de paciencia y de dedicación que estos pescadores podrán cambiar su
actitud y la visión de la pesca, antes de que sea demasiado tarde. Actualmente
muchos clubs de pesca deportiva tienen campañas activas sobre el Captura y
Libera, en un principio fue tema de burlas, muchos pescadores practicantes de
esta modalidad fueron vistos como extraterrestres, sin embargo con el pasar del
tiempo se ha ganado mas adeptos. Ahora; ¿por que se está cambiando de parecer?
por una sencilla razón, cada vez que vamos a pescar nos damos cuenta que las
capturas son cada vez menos, lugares donde se tenían por lo menos 10 capturas
(usando una módica cifra) en un día, ahora no se logra ni una. Simplemente es
una consecuencia de la pesca indiscriminada en las zonas, sumando también la
contaminación. Si sacamos cuentas por un momento, y hacemos un cálculo
matemático rápido nos daremos cuenta que la causa está en nuestro lado.
Generalmente vamos un grupo de pescadores, siempre nos gusta ir en grupo, la
pesca se basa en compartir, ahora bien, si cada uno de nosotros no libera su
captura y tenemos por lo menos diez capturas en un día, y a su vez nuestra
estancia en el sitio es de por lo menos tres días, sumaríamos unos treinta
peces muertos por persona, y si el grupo está conformado por lo menos de unas
diez personas entonces tendríamos unos trescientos peces muertos para nuestro
consumo en una jornada de solo tres días. Pero eso no queda allí, estamos hablando
de un solo grupo, pregunto, ¿cuantos grupos de pesca no hemos coincidido en un
sitio en una fecha determinada?, situación que hace que esta ecuación se eleve
exponencialmente. Tristemente es así, nosotros mismos estamos acabando con
nuestro patrimonio, con nuestros sitios, y nuestros hijos o nietos no podrán
disfrutar de lo que nosotros llegamos a gozar. ¿En que podemos ayudar?
practicando verdaderamente la pesca deportiva, capturando y liberando.
Por
otro lado, y no menos importante, es nuestra presencia en los sitios de pesca.
Allí no solo debemos de cuidarnos nosotros mismos, cosa que es muy importante,
también debemos colaborar con nuestro medio ambiente, recogiendo nuestra
basura, dejando todo mejor que como lo conseguimos, tragándonos nuestro orgullo
y recoger lo que otro ser humano ha dejado en el camino, de esa forma
lograremos en una pequeña medida conservar esos sitios para nuestras futuras
visitas y futuras generaciones. Claro está, no solo es nuestro trabajo, también
es tarea de la comunidad que lo habita, pero hay que empezar a crear la
conciencia tanto en los grupos de pescadores como en las poblaciones
habitantes. No es tarea fácil, pero de alguna forma hay que enseñar que esos
sitios pueden ser autosustentables, trayendo consigo una gran economía
turística generadora de empleos y prosperidad. ¿A que pescador no le gusta ir a
un sitio donde consiga de todo, tenga seguridad y buena atención?
También
es importante señalar nuestra participación y compromiso social y humano con
las comunidades. Generalmente utilizamos la pesca como medio de desahogo,
huyendo de nuestra cotidianidad, de nuestras obligaciones, sin embargo, toda
práctica acarrea cierto grado de responsabilidad y compromiso. Como ser tomados
en cuenta y en consideración si cada vez que llegamos a los lugares donde
hacemos vida como pescadores hacemos caso omiso a nuestro entorno, si no
entablamos algún tipo de empatía con las personas que allí se encuentran. Es
necesario acercarnos, valorar el talento humano que allí se localiza, observar
o escuchar de alguna manera sus necesidades, y por supuesto brindarles ayuda
siempre cuando esta esté dentro de nuestras posibilidades. De esa forma
lograremos crecer como seres humanos y como pescadores. Hay que recordar y
hacer énfasis, siempre, absolutamente siempre, necesitaremos de la ayuda de
algún lugareño, bien sea para un apoyo o para salvarnos la vida. Nuevamente,
muchos clubes de pesca están adoptando esta modalidad, estableciendo jornadas
de saneamiento de los sitios concurridos, ayuda a las comunidades con enceres,
comida, ropa, medicinas, atención médica, materiales, jornadas de ayuda a los
niños, regalando sonrisas, juguetes, actividades educativas y recreativas.
En
conclusión, Generando Valor Pescando (GVP) es simplemente una fórmula
matemática que se aplica a nuestro deporte. Y no es más que la sumatoria de
nuestro compromiso social y humano hacia nuestro medio ambiente y sus
habitantes, con la finalidad de hacernos mejores personas y pescadores.
GVP = Compromiso Social + Compromiso Ambiental +
Buena Pesca
Diógenes Mariño Torrellas
PescaVenezuela
Para Club de Pesca Entrepanas